Estados Unidos ha enviado un escuadrón anfibio al sur del Caribe, en respuesta a las amenazas de los cárteles de la droga en América Latina. Este despliegue es parte de la estrategia del presidente Donald Trump para combatir las organizaciones narcoterroristas en la región. Según fuentes anónimas, los buques USS San Antonio, USS Iowa Jima y USS Fort Lauderdale, que transportan a 4.500 militares, incluidos 2.200 infantes de marina, podrían llegar a las costas de Venezuela este domingo.
Las Fuerzas Armadas de Estados Unidos han iniciado un despliegue sin precedentes en aguas de América Latina y el Caribe. Este movimiento tiene como objetivo principal enfrentar a organizaciones narcoterroristas, como el Cartel de los Soles, que se cree está dirigido por Nicolás Maduro. Además de los buques anfibios, el despliegue incluye tres buques de guerra: USS Gravely, USS Jason Dunham y USS Sampson, que cuentan con capacidades defensivas y de ataque.
Se estima que alrededor de 4.000 marineros e infantes de marina participarán en estas iniciativas, que también incluyen aviones espía P-8, buques de guerra y al menos un submarino de ataque. El 25 de julio, el gobierno de Estados Unidos designó al Cartel de los Soles como organización terrorista, acusando a Maduro de ser su líder y de facilitar el tráfico de drogas hacia Estados Unidos y Europa.
El Departamento de Estado de EE.UU. ha señalado que Maduro ha corrompido las instituciones de Venezuela para apoyar al cártel en sus actividades delictivas. En consecuencia, se ha ofrecido una recompensa de 50 millones de dólares por información sobre Maduro. Mientras tanto, el régimen de Maduro niega cualquier actividad ilícita relacionada con el narcotráfico y ha amenazado con responder al despliegue estadounidense con un aumento de sus milicianos. La comunidad internacional observa con atención la situación en el Caribe, ante la posibilidad de un aumento de las tensiones.