La inteligencia artificial avanza a gran velocidad y está transformando la manera en que se realizan tareas en múltiples sectores. En Estados Unidos, este fenómeno comienza a impactar directamente en la estabilidad laboral de millones de personas que desempeñan funciones rutinarias o basadas en datos.
Sistemas capaces de generar respuestas instantáneas , automatizar procesos y ejecutar tareas complejas sin intervención humana obligan a replantear el papel de muchos trabajadores. Profesiones que antes requerían especialización o experiencia empiezan a ser susceptibles de automatización.
Un estudio de Microsoft Research midió el grado de exposición de diferentes ocupaciones frente a la inteligencia artificial. La investigación combinó datos de interacción de usuarios con Micros