Cualquier trabajador que alcance la edad de los 50 años puede comenzar también a tener miedo o dudas de si va a pode ser capaz de seguir manteniendo el trabajo que tiene. De hecho, es cuando más se suele pensar en la jubilación y qué hacer si de repente nos quedamos sin trabajo. Por suerte, entre las ayudas o prestaciones que ofrece el SEPE , está el subsidio para mayores de 52 años , que además permite seguir acumulando cotizaciones para la pensión. Sin embargo, los autónomos no deben pensar que ellos también tienen derecho a esta ayuda porque no es así.

En concreto, las aclaraciones recientes del propio SEPE han generado bastante inquietud en este colectivo que da por sentado que ellos también deberían tener derecho a este tipo de subsidio. Pero un asesor general de prestaciones ha explicado en un programa de radio que, salvo contadas excepciones, los autónomos no pueden solicitar la ayuda para mayores de 52 años . El motivo es que la normativa exige estar en una situación legal de desempleo y haber agotado antes una prestación contributiva, dos condiciones que dejan fuera a la gran mayoría de trabajadores por cuenta propia.

Por qué los autónomos no pueden acceder al subsidio de mayores de 52 años

La clave está en cómo se interpreta la llamada «situación legal de desempleo». Para ello SEPE el detalla una serie de casos en los que sí que se reconoce esa condición, pero entre los que no está para nada, el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). Esto significa que un autónomo que decide cerrar su actividad, aunque sea porque no puede mantenerla, queda fuera de los supuestos que permiten solicitar el subsidio a mayores de 52 años.

Además, esta ayuda está diseñada pensando en quienes han trabajado como asalariados y han agotado primero la prestación contributiva. Por eso, quienes han desarrollado casi toda su carrera como autónomos se encuentran con un obstáculo difícil de salvar: aunque tengan años de cotización en el RETA, ese tiempo no les sirve para iniciar la solicitud del subsidio. Esta diferencia con respecto a los trabajadores por cuenta ajena genera frustración y numerosas dudas, sobre todo entre quienes ven en esta ayuda la última opción de estabilidad antes de la jubilación.

El requisito de cotizaciones y la importancia de los 15 años

Otro de los puntos que más preguntas genera es el de las cotizaciones. La ley marca que es obligatorio haber cotizado al menos 15 años a la Seguridad Social, el mínimo necesario para tener derecho a una pensión contributiva. Ese requisito se aplica tanto a asalariados como a autónomos, aunque en la práctica no funciona igual para todos.

Un caso muy ilustrativo es el de una trabajadora que explicó su situación: tenía algo más de 14 años cotizados y le faltaban nueve meses para alcanzar los 15. Su idea era darse de alta como autónoma ese tiempo para poder después pedir el subsidio. La respuesta del SEPE fue tajante: esa vía no es válida . La única opción sería lograr esas cotizaciones a través de un empleo por cuenta ajena que, al finalizar, le dejara en situación legal de desempleo.

Qué alternativas tienen los autónomos que quieren acceder a la ayuda

La recomendación del SEPE es clara: si un autónomo quiere tener opción al subsidio, debe conseguir un contrato como asalariado y cotizar al menos tres meses. Una vez terminado, siempre que el cese no sea voluntario, sí podría encajar dentro de los requisitos. Es decir, no basta con cerrar el negocio propio, ya que eso no genera la situación legal de desempleo necesaria.

Este camino, aunque poco atractivo, se ha convertido en la única vía posible para muchos. Después de décadas cotizando como autónomos, deben buscar un trabajo temporal por cuenta ajena para completar las condiciones que la ley exige. Y además asegurarse de que la finalización no dependa de una renuncia personal, porque eso también les dejaría fuera. Una realidad complicada que el SEPE ha querido dejar clara para evitar falsas expectativas.

El mensaje del SEPE y lo que deben tener en cuenta los autónomos

El subsidio para mayores de 52 años es una de las ayudas más valiosas porque se mantiene hasta la jubilación y cotiza para la pensión. Pero los autónomos deben tener presente que no está diseñado para ellos en los mismos términos que para los asalariados. Su única salida pasa por cotizar como trabajadores por cuenta ajena y encontrarse después en un cese involuntario.

Con este recordatorio, el SEPE intenta despejar malentendidos. No existen atajos para entrar en el subsidio a través del RETA. La normativa distingue con claridad entre asalariados y autónomos, y esa diferencia marca el acceso a la ayuda. Para los trabajadores por cuenta propia, la estrategia pasa por planificar con tiempo y conocer bien las reglas para no llevarse sorpresas cuando llegue el momento de solicitar apoyo.