El estadio de los Diablos Rojos del México vivió un lamentable hecho para un aficionado. / Foto: @DiablosRojosMX
Lo que tenía que ser una fiesta en el Estadio Alfredo Harp Helú, casa de los Diablos Rojos del México, terminó por convertirse en una pesadilla para la familia Martínez que asistió a apoyar a los pingos, quienes juegan la Serie de Zona de los Playoffs de la LMB ante los Pericos de Puebla.
Y es que un menor de tan solo nueve años que recibió un pelotazo en la cabeza y ahora se encuentra en terapia intensiva por una hemorragia en el cerebro.
Incluso la familia de Simón Falah-Assadi Martínez solicita el apoyo de donadores de sangre, pues podrían necesitarla en cualquier momento por la delicada situación del menor, quien se encuentra internado en el Hospital Ángeles del Ped