El Consejo de Ministros ha declarado este martes «zonas afectadas por emergencia» en 16 de las 17 comunidades autónomas de España, excluyendo solo al País Vasco. Esta decisión responde a los devastadores incendios forestales y las recientes danas, que han causado estragos desde el 23 de junio hasta el presente. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, destacó que estamos ante una de las mayores catástrofes medioambientales de los últimos años, con daños significativos en infraestructuras y bienes tanto públicos como privados.

Marlaska subrayó la urgencia de activar el mecanismo de ayuda para los afectados, enfatizando que la «emergencia aún no se ha dado por cerrada». En particular, las comunidades de Castilla y León, Galicia y Extremadura han sufrido la pérdida de más de 300.000 hectáreas debido a los incendios, según datos del Sistema de Información de Incendios Forestales de la Comisión Europea de Copernicus.

El ministro también hizo hincapié en que esta crisis ha coincidido con la ola de calor más intensa registrada, con temperaturas superiores a los 4,6 grados por encima de lo habitual para esta época del año. Además, expresó sus condolencias a las familias de las víctimas y reconoció el esfuerzo de los miles de profesionales que han trabajado incansablemente en condiciones extremas, incluyendo bomberos, agentes medioambientales, y miembros de las fuerzas de seguridad y voluntarios.

El Gobierno se compromete a estar al lado de las instituciones afectadas y a proporcionar todas las ayudas necesarias para facilitar la recuperación de las zonas devastadas por esta catástrofe climática.