El hundimiento de una lancha rápida presuntamente cargada con drogas del Tren de Aragua, que dejó once personas muertas en aguas cercanas a Venezuela, abrió un nuevo debate en torno a la legalidad de las operaciones militares de Estados Unidos y sus posibles violaciones al derecho internacional.

El secretario de Defensa de ese país, Pete Hegseth, confirmó que la acción fue deliberada y tuvo como objetivo enviar un mensaje claro: “¿Quieren intentar traficar drogas? Este es un nuevo día. Es un día diferente. Y por eso, esos 11 narcotraficantes ya no están con nosotros. Estados Unidos no va a tolerar el tráfico de drogas en nuestro hemisferio” , dijo en entrevista con Fox News.

Si bien Washington sostiene que la embarcación pertenecía a una organización catalogada como terrorista, especia

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