Una controversia ha surgido tras la elección de Carlos Camargo como nuevo magistrado de la Corte Constitucional por parte del Senado, donde la mayoría votó a favor de su nombramiento. El presidente Gustavo Petro expresó su descontento con esta decisión, ya que su apoyo estaba dirigido hacia María Patricia Balanta.
Paloma Valencia, precandidata presidencial y miembro del Centro Democrático, comentó en El Debate de SEMANA sobre las intenciones del presidente. "Esta decisión es contra el Gobierno, contra las ínfulas autoritarias de este Gobierno, y esa manera que ha venido desarrollando de acabar el equilibrio de poderes", afirmó. Valencia subrayó la importancia de los controles al poder en una democracia, enfatizando que es crucial evitar que una sola persona o rama acumule poder absoluto.
La congresista argumentó que la elección de Camargo representa una victoria para el equilibrio de poderes. "Esta era una batalla de controlar el apetito expansionista del poder del Gobierno", indicó. Según Valencia, Petro tenía la intención de asegurar cinco votos en la Corte para facilitar la implementación de sus políticas sin obstáculos.
"Aquí se salvó el país de una constituyente", añadió, refiriéndose a la posibilidad de que el presidente y sus aliados intentaran derogar la Constitución de 1991 mediante un proceso ilegal si contaran con la mayoría en la Corte.
Valencia también sugirió que el Gobierno podría estar utilizando la crisis de seguridad actual como parte de un plan más amplio relacionado con las elecciones del próximo año. Se cuestionó si la situación de seguridad podría ser intencional, con el fin de justificar un decreto de conmoción interior que podría llevar a la postergación de las elecciones. "Sí tiene las mayorías en la Corte, lo puede hacer", concluyó.
La situación sigue en desarrollo.