En la Casa Rosada, se respira un notable optimismo ante las próximas elecciones en la provincia de Buenos Aires. Este cambio de clima es significativo, especialmente tras la reciente controversia generada por los audios que acapararon la atención mediática. Hasta hace una semana, el ambiente era de desmovilización, pero ahora, en las filas de Javier Milei, se habla de un "empate técnico". Un alto funcionario comentó que, entre ayer y hoy, las búsquedas del padrón electoral crecieron un 50 por ciento, lo que consideran una buena señal.
La hipótesis electoral del oficialismo sugiere que una mayor participación podría traducirse en un mejor resultado. Un colaborador libertario indicó que "los desmovilizados y los hastiados de la política" podrían decidir votar, considerando el estado de su provincia. Sin embargo, en el laboratorio electoral libertario se estima que el ausentismo podría superar el 40%, reflejando el descontento del electorado en diversas regiones del país. A pesar de esto, se ha observado un aumento en el interés por movilizarse en los últimos días.
La campaña de La Libertad Avanza había estado paralizada debido al escándalo de los audios de presuntas coimas. Un armador de la campaña mencionó que "la narrativa no existía" y que los candidatos se habían visto obligados a reducir su visibilidad. Sin embargo, dos eventos clave parecen haber cambiado la situación. Primero, la suspensión de una caravana de Milei en Lomas de Zamora debido a ataques de militantes opositores, y segundo, la revelación de los audios de Karina Milei, que unieron a las facciones libertarias en contra de lo que consideran una operación de inteligencia opositora.
El cierre de campaña de La Libertad Avanza en Moreno se convirtió en un evento central, donde el presidente instó a los bonaerenses a votar por un futuro diferente y a no dejarse influenciar por la política tradicional. A pesar de las acusaciones de coimas, varios colaboradores gubernamentales creen que el foco se ha desviado de estas acusaciones hacia la campaña electoral.
El Gobierno ha establecido que La Libertad Avanza está en un empate técnico con Fuerza Patria, una afirmación arriesgada que genera expectativas. Inicialmente, se preveía una victoria amplia contra el kirchnerismo, pero los recientes escándalos han modificado esas proyecciones. En la Casa Rosada, se manejan dos escenarios favorables: una victoria, que sería considerada un logro, o una derrota ajustada que podría motivar a los votantes para las elecciones generales.
Las expectativas son variadas en las diferentes secciones electorales. Se anticipan victorias en la Quinta y Sexta Sección, mientras que en la Primera se espera una ventaja que ayude a compensar una posible derrota en la Tercera. Sin embargo, el resultado global de votos a nivel provincial será crucial, ya que reflejará la correlación de fuerzas entre las alianzas políticas de cara a las elecciones generales de octubre.
Un buen resultado podría impulsar las expectativas en los mercados, aunque algunos miembros del oficialismo temen que un mal desempeño afecte la estabilidad política del Gobierno. Las tensiones internas también son evidentes, con conflictos entre sectores vinculados a la hermana presidencial y asesores, lo que podría complicar aún más la situación en las semanas venideras.