El Gobierno ha incrementado las reuniones de Gabinete y ha reconfigurado las "mesas políticas" en un intento por enviar señales de colaboración a sus aliados y gobernadores. Sin embargo, los resultados concretos de estos encuentros han sido escasos y se han mantenido en secreto. En la Casa Rosada, se solicita paciencia mientras se esperan los frutos de estas reuniones, especialmente tras la reciente derrota electoral.
Las mesas políticas, como la "mesa política bonaerense" ampliada a PRO y la "mesa política nacional", no han mostrado resultados visibles hasta el momento. La "mesa federal" con gobernadores, que busca jerarquizar el ministerio político, aún no tiene fecha programada. A pesar de la intención de mostrar iniciativa, el hermetismo ha sido la norma en las tres reuniones de Gabinete realizadas en días consecutivos, con advertencias de desvinculación para evitar filtraciones.
Desde abril, el Gobierno ha reducido la frecuencia de sus anuncios, lo que contrasta con la gestión activa del primer año y medio de administración. Un funcionario comentó: "Estas mesas no son un fin en sí mismo, pero no se pueden tomar decisiones de un día para el otro. Estamos en marcha". Hasta ahora, se han anunciado algunas decisiones de impacto moderado, como la reducción de tasas de interés y la jerarquización del Ministerio del Interior.
Sin embargo, se han ratificado decisiones previas, como el veto a la ley que modifica la distribución de Aportes del Tesoro Nacional, lo que podría afectar el inicio de una de las plataformas de diálogo con los gobernadores. Además, se ha señalado un corrimiento virtual de Eduardo Lule Menem, un asesor cuestionado, quien ya no figura en las listas de los encuentros decisivos.
En el PRO, la incorporación de sus principales figuras al ámbito de decisiones ha generado descontento. Un miembro del partido expresó: "Por ahora no hay nada. Los nuestros fueron los que salieron a poner la cara y no mucho más". A pesar de esto, el Gobierno promete una mayor participación efectiva. Javier Milei ha convocado a todos los miembros del PRO a una reunión en Olivos el próximo lunes, donde se espera que presenten una hoja de ruta con lineamientos claros.
En el entorno de Milei, se ha confirmado que el armador de la campaña en la provincia de Buenos Aires ha sido ratificado, aunque desde Balcarce 50 hay dudas al respecto. En el PRO, se considera que Santiago Caputo se perfila como el líder de la estrategia para las elecciones nacionales. Ayer, el consultor se reunió en privado con Cristian Ritondo, líder de PRO en Buenos Aires, para analizar los resultados de los recientes comicios.