El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este sábado que está preparado para implementar nuevas sanciones contra Rusia, pero bajo una condición: que los países de la OTAN dejen de adquirir petróleo ruso. En un mensaje publicado en su red social Truth Social, Trump expresó su disposición a aplicar "sanciones significativas" si todos los miembros de la OTAN acuerdan y comienzan a detener la compra de petróleo a Moscú.

Trump ha amenazado repetidamente con sanciones a Rusia, buscando afectar los ingresos que el país necesita para continuar su esfuerzo bélico. Sin embargo, hasta el momento, no ha llevado a cabo estas amenazas, lo que ha generado frustración en Kiev.

El mandatario republicano, quien se reunió en agosto con el presidente ruso Vladimir Putin en Alaska, calificó de "impactante" que la OTAN siga comprando petróleo ruso, argumentando que esto debilita la posición de negociación de la alianza con Moscú. "Estoy listo cuando ustedes lo estén. Solo digan cuándo", afirmó Trump.

Además, propuso que los miembros de la OTAN aumenten los aranceles a China entre un 50% y un 100%, en un intento de presionar para poner fin a la guerra en Ucrania. Esta sugerencia surge en medio de sospechas de que China ha reforzado su cooperación estratégica con Rusia.

Recientemente, el presidente chino Xi Jinping se reunió con Putin en Pekín. Trump argumentó que si la OTAN impone estos aranceles, que podrían eliminarse tras el fin del conflicto, sería "de gran ayuda para poner fin a esta mortífera, pero ridícula guerra".

"China tiene un gran control, e incluso dominio, sobre Rusia y estos poderosos aranceles romperán ese dominio", añadió en su mensaje, que presentó como una "carta a la OTAN y al mundo". Concluyó afirmando que si la alianza de 32 países "hace lo que digo, la GUERRA concluirá rápidamente" y advirtió que, de lo contrario, "solo están desperdiciando mi tiempo".