
Incluir un vaso de zumo de naranja en la rutina diaria puede ser mucho más que un gesto refrescante: es un indicador de hábitos alimentarios más saludables. Así lo demuestra un estudio internacional publicado en la revista Nutrients , que concluye que las personas que lo consumen a diario tienen más probabilidades de seguir una dieta equilibrada y cumplir con las recomendaciones nutricionales.
La investigación, realizada por expertos de MS-Nutrition (Francia) y de la Universidad de Washington (EEUU) , analizó los datos de más de 4.000 participantes de la encuesta nacional de salud y nutrición de Estados Unidos (NHANES) entre 2017 y 2023. Los resultados revelan que quienes beben zumo de naranja natural de forma habitual disfrutan de dietas más ricas en nutrientes esenciales como potasio, calcio y vitamina C, además de registrar un consumo menor de azúcares añadidos.
Los patrones alimentarios de estos consumidores no sólo incluyen más fruta, sino también más verduras, legumbres, cereales integrales, lácteos y proteínas de origen animal y vegetal. Además, presentan niveles más bajos de grasas saturadas y sodio. «Esto sugiere que el consumo de zumo natural es un aliado dentro de una nutrición responsable», explica el profesor Adam Drewnowski, coautor del trabajo y catedrático de la Universidad de Washington.
Dieta más equilibrada
La dietista y divulgadora británica Carrie Ruxton añade que «estos hallazgos son muy positivos, porque confirman que el zumo no sustituye a la fruta entera, sino que la complementa. Incorporar un vaso de zumo natural de naranja al día es una forma sencilla y asequible de mejorar la ingesta de nutrientes y de apoyar una dieta más equilibrada, especialmente en los grupos con menor poder adquisitivo».
El estudio también subraya un aspecto clave para el futuro: las guías dietéticas deberían considerar no sólo la calidad nutricional de los alimentos, sino también su accesibilidad económica. En este sentido, el zumo de naranja natural se presenta como una herramienta asequible para acercar a la población a un patrón alimentario más saludable y completo.