Winston Churchill lo llamó en 1944 “el crimen sin nombre”.
Y es que no existía un término, una palabra, para expresar la gigantesca y enorme barbarie que los nazis cometieron contra el pueblo judío, que según los cálculos se saldó con el asesinato de seis millones de hombres, mujeres, niños y niñas.
Dos de cada tres judíos que se contaban en Europa antes de la Segunda Guerra Mundial fueron exterminados.
Sólo en agosto, septiembre y octubre de 1942, los nazis perpetraron cada mes alrededor de medio millón de asesinatos de judíos, es decir, mataron cada día a 15,000, según un estudio publicado liderado por Lewi Stone , profesor de Matemáticas en la Universidad de Tel Aviv.
Sin embargo, no había un vocablo con el que denominar a esa matanza contra un colectivo realizada de manera organi