La tensión en el norte y este de Europa ha aumentado después de que varios drones irrumpieran en el espacio aéreo de Dinamarca y Estonia , episodios que las autoridades atribuyen a Rusia . La OTAN se reunió este martes de manera urgente para evaluar la situación y definir posibles respuestas.
Desde Copenhague, la primera ministra danesa, Mette Frederiksen , condenó lo ocurrido en las inmediaciones del aeropuerto de la capital. Lo calificó como " el ataque más grave contra infraestructuras críticas danesas hasta la fecha" y señaló directamente al Kremlin como responsable. Según la primera investigación policial, los aparatos eran drones de gran tamaño operados con medios avanzados, lo que apunta a un actor estatal.
Noruega y Estonia también denuncian violaciones aéreas