Son los fraudes, los robos a los ciudadanos comunes, las extorsiones, las amenazas, la sensación de impunidad lo que erosiona la convivencia, la confianza y la gobernanza democrática.

La más reciente Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2025 del Inegi, publicada el 18 de septiembre, aporta datos que comprometen seriamente la narrativa oficial en materia de seguridad. La imagen que emerge no es la de grandes golpes al crimen organizado, sino la de una sociedad asediada por delitos del fuero común —fraudes, robos, amenazas, extorsión— que inciden directamente en la cotidianidad de millones de mexicanos. Si la estrategia de seguridad no reconoce esto como un problema central, estamos frente a una falla estructural de primer orden.

Lo que revelan l

See Full Page