Es muy probable que, en algún momento, hayas compartido una preocupación o una reflexión en voz alta y, de repente, alguien ha aparecido con un consejo que no pedías . En lugar de sentirte comprendido, la sensación que queda es la de estar siendo juzgado o, peor aún, de que tu capacidad para resolver lo tuyo pasa por un tamiz ajeno. La psicología explica que este tipo de intervenciones no solicitadas activan en nuestra mente la idea de “no puedes con esto solo” , un mensaje que erosiona la autoeficacia, piedra angular de la motivación, la resiliencia y el desempeño profesional.
Ante esta dinámica cotidiana, la investigadora del comportamiento Shadé Zahrai propone cinco respuestas diseñadas para devolver el control de la conversación a quien la inició, sin generar confrontación.