El Gobierno ha dado luz verde a la estrategia de la Inspección de Trabajo para los próximos tres años, un programa que mezcla más medios humanos con una fuerte inversión en herramientas digitales y que obligará a las empresas a revisar de inmediato la forma en la que registran jornadas , nóminas y cotizaciones .

Con la incorporación progresiva de 550 inspectores y subinspectores y un paquete de 28,5 millones de euros para modernizar sistemas, la administración prepara una oleada de actuaciones que afectarán sobre todo a la temporalidad fraudulenta, las horas extra no abonadas y las altas irregulares en Seguridad Social.

Según detalla Tania Flores , responsable de Relaciones Laborales y RRHH de dPG Legal , la transformación no es solo cuantitativa: “Supone una

See Full Page