El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha ordenado la instalación de altavoces en la Franja de Gaza para transmitir su discurso ante la Asamblea General de la ONU. Esta medida se produce en un contexto de intensificación de la ofensiva militar israelí tras los ataques del 7 de octubre de 2023.

Netanyahu, desde Nueva York, confirmó que el objetivo de esta acción es que tanto los rehenes como los gazatíes escuchen su mensaje. Sin embargo, la decisión ha generado confusión y críticas tanto en el ejército como entre los familiares de los secuestrados.

Fuentes militares han expresado su sorpresa y malestar ante la orden, calificándola de "maniobra propagandística". Un alto mando del ejército comentó: "Nadie entiende el beneficio militar de esto". Además, familiares de los rehenes han criticado la decisión, argumentando que debería priorizarse la comunicación directa con los soldados y los secuestrados. Lishay Miran-Lavi, esposa de un rehén, pidió que se le permitiera enviar un mensaje a su marido, enfatizando que "el pueblo de Israel lucha por ellos".

El ex embajador de la ONU, Gilad Erdan, instó a esperar el discurso antes de emitir juicios sobre la medida. Netanyahu, en su discurso, afirmó que su intención es que los rehenes escuchen su mensaje, y que se han realizado esfuerzos para que este llegue a los líderes de Hamas.

Sin embargo, la colocación de altavoces ha sido criticada por poner en riesgo a los soldados en una zona de combate. Un grupo de madres de soldados ha manifestado su preocupación, preguntando: "¿Durante cuánto tiempo va a usar a nuestros hijos para su campaña personal?".

En otro aspecto, el avión de Netanyahu tuvo que modificar su ruta hacia Estados Unidos para evitar sobrevolar países que podrían cumplir órdenes de arresto por crímenes de guerra. La ofensiva israelí en Gaza ha dejado más de 65.500 palestinos muertos y cerca de 167.000 heridos, según fuentes gazatíes, lo que ha suscitado críticas internacionales sobre las acciones del ejército israelí.