Hay otro país, menos sonoro que el país de las reservas escasas , de la apremiante deuda externa en dólares y de las supertasa s, un país que pide un plan de medidas que ponga la mira en la producción y lo corra del jubileo financiero de corto plazo y las reglas de juego digitadas por quienes arman el juego.
Sin más vueltas, el caso es que tenemos a la industria, la construcción y el comercio mayorista y minorista juntos bajando hace un rato largo como por un tobogán. Esto es, tres sectores que empujan actividades de otros sectores, que generan trabajo diversificado y emplean mucha gente y que son, finalmente, tres piezas fuertes en la bien llamada economía real.
A propósito de eso mismo, sobran datos del INDEC, del Centro de Estudios de la UIA y de otras fuentes en los que y