Un año después del trágico accidente que costó la vida a su compañera Muriel Furrer, la suiza Anja Grossmann logró un emotivo tercer puesto en la carrera de ruta júnior del Mundial de Kigali.

La imagen de Grossmann alzando la vista al cielo en el podio resume mejor que cualquier palabra lo vivido en Ruanda. La joven ciclista helvética, debutante en un Campeonato del Mundo, firmó una actuación memorable para colgarse el bronce y dedicarlo a la memoria de Furrer, fallecida en Zúrich 2024 tras un accidente durante la prueba júnior.

“Fue muy duro volver a competir en este día, con lo que significa para todos nosotros. Sólo llegar a la salida ya era un reto. Corrí con el corazón y lo hice por Muriel”, confesó emocionada tras la prueba.

Apenas con 16 años, Grossmann se metió en el corte

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