Un tiroteo al interior de una iglesia de los Santos de los Últimos Días, ubicado en Grand Blanc, Michigan, dejó este domingo escenas de caos, terror y destrucción. El ataque se registró por la mañana, durante una reunión de feligreses, y culminó con un intenso incendio que consumió el edificio religioso.
Los primeros informes apuntan a que varios disparos fueron efectuados al interior del templo. Según testigos entrevistados por medios locales, los asistentes entraron en pánico y buscaron refugio tras escuchar las detonaciones.
“Estábamos orando cuando escuchamos los disparos. Todo el mundo se tiró al suelo o corrió hacia la salida”, relató una feligresa que pidió mantenerse en el anonimato.
LA IGLESIA TERMINÓ EN LLAMAS
Minutos después del tiroteo, el templo comenzó a incendiarse. Vide