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EE. UU. alimentó la esperanza de una remontada épica en los individuales, pero la reacción final del Viejo Continente le dio la quinta victoria de su historia en suelo norteamericano 29 sep 2025 . Actualizado a las 00:25 h.
Todo el drama y la emoción del resultado, toda la pasión de las gradas, todo el talento de los jugadores y las alternativas en el marcador que ofrecen tantos partidos a la vez convirtieron ayer el cierre de la Ryder Cup en un espectáculo superlativo. Taquicárdico. Europa abrió el día en Bethpage con la mayor ventaja de que había dispuesto nunca en suelo norteamericano, con 4,5 a 11,5, con 12 partidos individuales por delante en Nueva York. Y antes de empezar siquiera las hostilidades, la baja por lesión del noruego Viktor Hovland supuso automát