
En el mundo de Donald Trump hay semanas y semanas. La pasada fue una de las más intensas. Desde declarar la guerra al Tylenol –la marca con la que se comercializa el paracetamol– hasta ofuscarse con una escalera mecánica , Trump se ha superado a sí mismo con sus meteduras de pata, declaraciones extravagantes y acrobacias descabelladas, muchas de las cuales implican decisiones con consecuencias en el mundo real.
Esta fue la semana en el teatro del absurdo político:
Sábado
“Pam”, escribió Trump en las redes sociales, dirigiéndose a Pam Bondi, la fiscal general. El presidente exigió a Bondi que emprendiera acciones legales contra adversarios políticos como James Comey, exdirector del FBI, y Letitia James, fiscal general de Nueva York, cuyo nombre escribió mal como “Leticia”.
Trump los declaró a “todos culpables como el demonio” e insistió: “No podemos retrasarlo más, está acabando con nuestra reputación y credibilidad”. Sin embargo, el presidente borró su publicación en Truth Social aproximadamente una hora después, lo que provocó especulaciones de que había intentado enviar un mensaje directo a Bondi, pero pulsó el botón equivocado.
Domingo
En su discurso durante el funeral del activista ultra Charlie Kirk, asesinado recientemente, Trump transmitió un mensaje que contrastaba radicalmente con el tema predominante del evento, la reconciliación.
El presidente recordó que Kirk había dicho que quería que sus oponentes ideológicos supieran que los quería. “Ahí es donde discrepaba con Charlie”, afirmó. “Odio a mis oponentes y no les deseo lo mejor, lo siento”.
En otro momento incómodo durante la interpretación de America the Beautiful , Trump bailó un poco mientras estaba de pie junto a Erika, la afligida viuda de Kirk.
Lunes
Trump ordenó a la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) que emitiera nuevas directrices aconsejando a las mujeres embarazadas que evitaran el acetaminofén, el ingrediente activo del Tylenol, citando una relación no demostrada con el autismo.
Pero “acetaminofén” resultó difícil de pronunciar. “Con efecto inmediato, la FDA notificará a los médicos que el uso de aceta... bueno, veamos cómo se dice”, dijo Trump. “Acetam... enofina. Acetaminofén. ¿Está bien? Que es lo que comúnmente se conoce como Tylenol”.
Las mujeres embarazadas con fiebre alta deben consultar a su médico sobre la posibilidad de tomar una dosis pequeña, añadió el presidente. “Si no pueden aguantar, si no pueden hacerlo, eso es lo que tendrán que hacer. Tomarán un Tylenol, pero con mucha moderación. Creo que no deberían tomarlo”.
No se ha establecido ninguna relación entre el Tylenol y el autismo. Los expertos en salud señalaron un estudio sueco publicado el año pasado que hizo un seguimiento de 2,4 millones de nacimientos y no encontró pruebas de una asociación entre la exposición prenatal al medicamento y el autismo.
Martes
Una década después de bajar por la escalera mecánica de la Torre Trump para anunciar su candidatura a la presidencia, Trump se vio interrumpido en su camino hacia la sede de la ONU en Nueva York. Él y su esposa, Melania, acababan de subir a una escalera mecánica cuando esta se detuvo abruptamente.
En su discurso ante la Asamblea General de la ONU , Trump afirmó falsamente que “puso fin a siete guerras” y se quejó amargamente de que nunca recibió una llamada telefónica de los líderes de la ONU. “Todo lo que obtuve de las Naciones Unidas fue una escalera mecánica que, al subir, se detuvo justo en el medio. Si la primera dama no estuviera en buena forma, se habría caído, pero está en buena forma. Ambos estamos en buena forma”.
“Estas son las dos cosas que obtuve de las Naciones Unidas, una escalera mecánica defectuosa y un teleprompter defectuoso. Muchas gracias”, añadió.
Trump también aprovechó el escenario mundial para alardear de la gloria de Estados Unidos y reprender a los líderes mundiales: “Es hora de poner fin al fallido experimento de las fronteras abiertas. Tienen que acabar con él ahora mismo. Se lo puedo asegurar. Soy muy bueno en estas cosas. Sus países se están yendo al infierno”.
Miércoles
El incidente de la escalera mecánica se agravó aún más. En un extenso mensaje de 357 palabras publicado en las redes sociales, Trump afirmó: “Ayer se produjo una VERDADERA VERGÜENZA en las Naciones Unidas: ¡no uno, ni dos, sino tres sucesos muy siniestros! No fue una coincidencia, fue un triple sabotaje en la ONU. Deberían avergonzarse de sí mismos”.
La escalera mecánica “se detuvo en seco”, escribió, y expresó su alivio por que él y la primera dama “no cayeran de bruces sobre los bordes afilados de estos peldaños de acero”. Luego, cuando Trump subió al estrado, su teleprompter se quedó “completamente en negro”, añadió.
Después, tras verse obligado a improvisar parte de su discurso ante la Asamblea General, le preguntó a su esposa cómo lo había hecho y ella respondió: “No he podido oír ni una palabra de lo que has dicho”.
Trump exigió una investigación inmediata y añadió: “Deben conservarse todas las cintas de seguridad de la escalera mecánica, especialmente las del botón de parada de emergencia. El Servicio Secreto está involucrado. ¡Gracias por su atención a este asunto!”.
La ONU dijo que un camarógrafo de la delegación estadounidense que corría delante de Trump pudo haber activado inadvertidamente el mecanismo de parada en la parte superior de la escalera mecánica, mientras que la Casa Blanca era responsable del teleprompter.
Jueves
Trump inició una reunión en el Despacho Oval con el presidente turco, Recep Tayyip Erdoğan, con el siguiente comentario: “Somos amigos desde hace mucho tiempo, de hecho, incluso durante los cuatro años que estuve en el exilio, injustamente, como se ha demostrado. Elecciones amañadas”.
Señalando a Erdoğan, añadió: “Él sabe más que nadie sobre elecciones amañadas”.
Durante la reunión, Trump también culpó a la izquierda del aumento de la violencia política, a pesar de que las estadísticas muestran lo contrario, y lanzó una amenazadora advertencia: “Quiero decir que suceden cosas malas cuando juegan a estos juegos y les daré una pequeña pista: la derecha es mucho más dura que la izquierda. Pero la derecha no está haciendo esto, no lo están haciendo y más les vale no animarlos, porque no será bueno para la izquierda”.
Más tarde, mientras firmaba decretos, Trump se desvió del guion para criticar a la congresista demócrata Jasmine Crockett, que es negra. “¿Tiene alguna relación con el difunto y gran Davy Crockett? No lo creo. Déjame decirte algo antes de que me lo preguntes. Es una persona con un coeficiente intelectual muy bajo”.
Mientras tanto, añadió un paseo de la fama presidencial a la Casa Blanca, con retratos de él mismo y de sus predecesores, excepto uno. En lugar del retrato de Joe Biden, Trump colgó una foto de un boli automático firmando el nombre del presidente demócrata .
Viernes
A cuatro días del inminente 'cierre' del Gobierno, Trump fue a ver a los golfistas estadounidenses enfrentarse a Europa en la Ryder Cup. “El equipo no lo está haciendo muy bien”, explicó. “Así que, cuando me enteré, dije: 'Subamos al avión. Tenemos que volar y ayudarles”.
Trump también volvió a dar consejos médicos sin fundamento, repitiendo su petición a las mujeres embarazadas de que dejaran de usar Tylenol. También pidió que la vacuna combinada contra el sarampión, las paperas y la rubéola se dividiera en inyecciones separadas, y que los niños no recibieran la vacuna contra la hepatitis B, que normalmente se administra en las primeras 24 horas después del nacimiento, antes de los 12 años.
En una publicación en Truth Social, el presidente escribió: “Mujeres embarazadas, NO UTILICEN TYLENOL A MENOS QUE SEA ABSOLUTAMENTE NECESARIO, NO DEN TYLENOL A SUS HIJOS PEQUEÑOS POR PRÁCTICAMENTE NINGÚN MOTIVO, DIVIDAN LA VACUNA MMR EN TRES VACUNAS TOTALMENTE SEPARADAS (¡NO MEZCLADAS!), PONGAN LA VACUNA CONTRA LA GRIPE POR SEPARADO, PONGAN LA VACUNA CONTRA LA HEPATITIS B A LOS 12 AÑOS O MÁS, Y, LO QUE ES MÁS IMPORTANTE, ¡PONGAN LA VACUNA EN CINCO VISITAS MÉDICAS SEPARADAS!”.
El consejo de Trump va en contra del de las organizaciones médicas, que citan datos de numerosos estudios y décadas de práctica.