¡Huelga histórica en el Nacional Monte de Piedad! Los trabajadores del Nacional Monte de Piedad iniciaron una huelga a partir de la medianoche del 1 de octubre. Esto ocurrió tras el fracaso de las negociaciones entre la dirigencia sindical y la administración de la institución. El paro afecta a más de 300 sucursales y pone en riesgo los servicios de préstamos prendarios, esenciales para millones de personas en el país.

El conflicto se origina en la interpretación y el incumplimiento de un convenio firmado el 1 de marzo de 2024. Este acuerdo, alcanzado tras cuatro años de tensiones y mediaciones de diversas autoridades laborales, fue respaldado por el 84.2% de la base trabajadora. Incluía modificaciones en el Contrato Colectivo de Trabajo (CCT), el respeto a derechos adquiridos y el mantenimiento de prestaciones para los empleados.

Arturo Zayún González, secretario general del Sindicato de Trabajadores del Nacional Monte de Piedad, declaró: “Siendo las doce de la noche del día 1 de octubre, formalmente y legalmente estamos estallando una huelga en virtud de que la administración ha violado constantemente el contrato colectivo de trabajo a través de un acoso laboral, con despidos injustificados, violando prestaciones del contrato que son fundamentales para las familias de los trabajadores”.

Zayún enfatizó que el sindicato ha estado dispuesto a llegar a un acuerdo que respete el contrato colectivo y los derechos de los trabajadores. Además, mencionó que la crisis actual es provocada por la administración y el patronato, cuyos miembros perciben salarios superiores a 500 mil pesos mensuales, en contraste con las condiciones de la base trabajadora.

El líder sindical subrayó que el Monte de Piedad tiene como objetivo servir a los sectores más desfavorecidos y advirtió que cualquier cambio que ponga en riesgo esa función afecta tanto a los empleados como a la comunidad usuaria. Zayún destacó la legitimidad del movimiento, que fue resultado de un congreso nacional sindical y una consulta con todos los trabajadores del país, obteniendo un apoyo mayoritario.

Durante la declaración de huelga, se evidenció la solidaridad sindical con la presencia de representantes de otras organizaciones, como los telefonistas. Zayún concluyó su mensaje afirmando: “El diálogo es la mejor arma para poder crecer y poder crecer también los recursos que llegan a los trabajadores”. Las consignas de los trabajadores resonaron: “¡Sindicatos unidos, jamás serán vencidos!” y “¡Ni un paso atrás!”.

El descontento entre los trabajadores aumentó tras la promoción de ascensos y vacantes sin la participación de los órganos sindicales, así como la reducción de prestaciones y la instauración de prácticas consideradas hostiles. La situación actual plantea un desafío significativo para la administración del Nacional Monte de Piedad y sus empleados.