Este miércoles, el gobierno federal de Estados Unidos inició un cierre parcial que afecta diversas agencias y servicios públicos, con consecuencias económicas y operativas en todo el país.

Se trata del primer cierre gubernamental en casi siete años.

Entre las medidas adoptadas, se contempla la suspensión temporal de empleo para miles de trabajadores federales, lo que podría paralizar algunas funciones administrativas. Sin embargo, actividades consideradas esenciales continuarán operando.

Seguridad Nacional y migración seguirán activas

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) mantendrá la mayoría de sus operaciones, incluyendo Aduanas y Protección Fronteriza, ICE, TSA, CIS y FEMA.

Según el plan publicado por la agencia, solo 14.000 de sus 271.000 empleados serían suspendidos tempora

See Full Page