La Agencia para la Educación nació atendiendo a jóvenes y adultos en contextos productivos, pero su trabajo siempre estuvo cerca de jardines, colegios, universidades y centros de formación. La idea que organiza esa trayectoria es la de sostener la calidad con sentido práctico: “El sector productivo le viene diciendo a la universidad: necesito que cambies el chip”, decía Germán Darío Hernández Rojas en diálogo con Ticmas. Ya no alcanza con enseñar a usar un software; se trata de cómo se piensan los problemas y las soluciones , y de fortalecer un conjunto de habilidades que el mercado pide con claridad: resiliencia, trabajo en equipo y buena comunicación, sin importar el título de grado.
Es un diagnóstico que devuelve la mirada a la escuela. Si las empresas reclaman pensamiento crític