Tras los aplazamientos por razones distintas en marzo, en primer lugar, y posteriormente en julio, el propietario del Medusa Beach , el austriaco Christian Arnsteiner, tiene cita en el juzgado de Instrucción número 9 de Palma el próximo 11 de noviembre. Allí tendrá la oportunidad de explicar su versión sobre el trágico derrumbe por segunda vez. En la primera, ante el juez de guardia horas después de ser detenido por la Policía Nacional, se acogió a su derecho a no declarar. El dueño del local está acusado de cuatro delitos de homicidio imprudente y seis de lesiones.

Se prevé una instrucción larga y tediosa, habida cuenta de la gran cantidad de partes personadas , que han ido aportando de un tiempo a esta parte mucha documentación sobre lesiones sufridas y la valoración de los da

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