En la plataforma comercial Andrés Avelino Cáceres, el caos parece una rutina. Entre carretillas, taxis, buses, loncheritas y montones de productos apilados en las veredas, miles de compradores y comerciantes se cruzan a diario en un espacio donde el desorden es inevitable.
Sin embargo, detrás de ese panorama congestionado late una fuerza económica que sostiene a miles de familias arequipeñas y que, con planificación, podría transformarse en el primer mercado modelo del sur del país.
El desarrollo de la plataforma inició a finales de los años 80 e inicios de los 90. La zona comenzó a poblarse de comerciantes ambulantes que fueron reubicados desde el centro histórico de Arequipa hacia el actual eje comercial, durante la gestión del desaparecido alcalde provincial de Arequipa Luis Cáceres.