El Tribunal Superior de Bogotá absolvió al expresidente Álvaro Uribe Vélez el 21 de octubre, tras más de cuatro horas de deliberación. Esta decisión revoca la condena inicial de 12 años de prisión por fraude procesal y soborno en actuación penal. La lectura del fallo fue realizada por el magistrado Manuel Antonio Merchán, quien, junto a la magistrada Alexandra Ossa, desvirtuó las conclusiones de la jueza 44 penal de Bogotá, Sandra Liliana Heredia. La magistrada Leonor Oviedo salvó su voto, mostrando disenso con la decisión.

La absolución de Uribe, que no pudo ser vinculado como determinador de las acciones del abogado Diego Cadena, condenado a siete años de cárcel, plantea interrogantes sobre su futuro político. Gabriel Vallejo Chujfi, director del Centro Democrático, confirmó que Uribe podría aspirar a una curul en el Senado para el periodo 2026-2030, ocupando el puesto 25 en la lista cerrada del partido. Esto se enmarca en un contexto donde el Centro Democrático ha visto una disminución en su representación, pasando de 19 senadores en 2018-2022 a 13 en 2022-2026.

La senadora María Fernanda Cabal ha instado a Uribe a considerar una candidatura a la vicepresidencia, pero Vallejo aclaró que esta posibilidad no ha sido discutida públicamente con el expresidente. En una entrevista con Blu Radio, Vallejo afirmó: "Nosotros le habíamos anunciado al país hace más de un mes esa intención del presidente de aspirar al Senado, en la lista cerrada en el puesto 25 con un solo propósito: ayudar a sacar el mayor número de senadores posibles".

La decisión del tribunal no solo marca un hito en la carrera política de Uribe, sino que también cierra un capítulo en uno de los procesos judiciales más significativos en la historia reciente de Colombia. La absolución permite que Uribe mantenga su influencia en el Centro Democrático y en la política nacional, aunque su futuro como candidato dependerá de las circunstancias judiciales y políticas que se presenten en los próximos meses. La oficialización de las candidaturas se espera para el 28 de noviembre, lo que añade un elemento de expectativa a la situación política del país.