En pleno siglo XVI, las cortes renacentistas italianas fueron testigo del auge de las cortesanas ilustradas. Estas mujeres, conocidas como «cortigiane oneste», no eran meras acompañantes, sino intelectuales refinadas -poetas, músicas, compositoras, - que participaban activamente en los debates cortesanos. Aunque seguían dependiendo económicamente de sus protectores, gozaban de una autonomía intelectual. No se limitaban a inspirar como musas; sino que participaban activamente en los debates filosóficos, creaban obra propia y dejaban boquiabiertos a los eruditos de su época.

Este fenómeno no fue marginal: Veronica Franco, Camilla Pisana, Alessandra Fiorentina, Vittoria Colonna y Beatrice Ferrarese son solo algunos nombres de un amplio registro de mujeres italianas altamente dotadas. Entre

See Full Page