Hay derrotas que se ocultan detrás del telón. Otras se maquillan con discursos altisonantes. Pero esta, la del Pacto Histórico el pasado domingo, se celebra como si fuera victoria. Porque cuando el relato se impone sobre la realidad, el fracaso se convierte en fiesta. Sí, con poco más de 2,7 millones de votos, el petrismo se lanza a los aplausos y el gobierno brinda por una caída electoral de proporciones históricas.
Dicen que fue una jornada “no concurrente”, como si esa etiqueta bastara para explicar el bajón. Pero lo omiten todo: la consulta incluía la conformación de listas al Senado y a la Cámara, activando así a cientos de precandidatos que compitieron, movieron recursos y pusieron en circulación su maquinaria electoral, lo que hizo que la jornada se volviera concurrente. No por cal

Semana

Noticias de Colombia
Infobae Colombia
Semana Mundo
Semana Salud
Las 2 Orillas
El Colombiano