La investigación parlamentaria que se inició para indagar en los contratos de mascarillas suma ya 80 sesiones y 90 comparecientes sobre una amalgama de asuntos con "conexión" con Sánchez

Análisis - Los 18 meses de investigación del Senado desmontan bulos sobre Begoña Gómez y el rescate de Air Europa. Por José Manuel Romero

“Yo no soy capaz de distinguir a una mujer que ejerce la prostitución. Usted supongo que tampoco. ¿O usted sí?”. Fue una de las preguntas que la senadora del Partido Popular Rocío Dívar lanzó a la ministra de Educación, Pilar Alegría, cuando fue citada a comparecer en la comisión de investigación del Senado sobre el llamado caso Koldo. “En fin”, respondió la también portavoz del Gobierno visiblemente molesta. La escena es solo una anécdota de las más de 200 horas de trabajo que acumula una comisión por la que han pasado 89 comparecientes en un año y medio y que espera para este jueves al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Pero da una idea del espectáculo en que se han convertido algunas de sus sesiones.

El PP, con una holgada mayoría en el Senado, registró el 26 de febrero de 2024 la petición de creación de una comisión parlamentaria para indagar en los contratos de la pandemia “relacionados con la intermediación” de Koldo García. Su propuesta fue aprobada por unanimidad. En los meses siguientes, sin embargo, el partido de Alberto Núñez Feijóo utilizó su rodillo parlamentario para ampliar su objeto en hasta cuatro ocasiones. Lo hizo para incluir los contratos “relacionados” con “el resto de investigados” en la trama que supuestamente anidó en el Ministerio de Transportes, así como los delitos de corrupción con “relación” o “conexión” con ellos.

Es un enunciado amplísimo que ha permitido a los conservadores convertir esta comisión en una especie de cajón de sastre en el que se han acumulado una multitud de temas periféricos de forma insólita en la historia de las comisiones de investigación parlamentaria. La amalgama de asuntos abordados va desde los contratos de mascarillas durante la pandemia, hasta el millonario rescate a la aerolínea Air Europa, las adjudicaciones de la empresa pública Red.es al empresario Juan Carlos Barrabés, las tareas de la asesora que gestionaba la agenda de Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, el llamado caso Delcy, o las supuestas fiestas en Paradores durante la pandemia en las que habría participado el exministro José Luis Ábalos.

Sánchez será el compareciente número 90. Se convertirá este jueves en el primer jefe del Ejecutivo en ejercicio en enfrentarse a una comisión parlamentaria. Antes que él han pasado por la comisión ocho de los 22 ministros que forman su gabinete: Pilar Alegría (Educación), Fernando Grande-Marlaska (Interior), Óscar López (Transformación Digital), María Jesús Montero (Hacienda), Luis Planas (Agricultura), Óscar Puente (Transportes), Elma Saiz (Seguridad Social) y Ángel Víctor Torres (Política Territorial). Este último ha comparecido en hasta tres ocasiones. También han sido interrogados cuatro exministros: Reyes Maroto (Industria), Salvador Illa (Sanidad), Teresa Ribera (Transición Ecológica) y el propio Ábalos, que estuvo en el primer grupo de comparecientes.

La presidenta del Congreso, Francina Armengol, ha sido llamada en dos ocasiones, al igual que la presidenta del Tribunal de Cuentas, Enriqueta Chicano. Asimismo, han comparecido ocho altos cargos de autonomías, más de una veintena de directivos de empresas públicas, cinco mandos de la Policía o la Guardia Civil o seis empresarios, algunos de ellos vinculados a los supuestos amaños que investiga el Tribunal Supremo.

Además, la voluntad del PP es que se produzcan un centenar de comparecencias que todavía no están señaladas. La última prórroga de seis meses se aprobó el pasado 1 de mayo. Los trabajos se prolongarán al menos hasta el próximo diciembre. La relación de comparecientes que ya han pasado por la comisión la sitúan como una de las más numerosas de la historia democrática. La comisión que buscó responsabilidades políticas tras los atentados del 11M celebró cincuenta sesiones por las que pasaron algo más de medio centenar de comparecientes. La que indaga en el caso Koldo/Ábalos/Cerdán alcanza ya las 80 sesiones y todavía no ha culminado.

“Un éxito”, según el PP

El PP defiende que sus senadores “han desmontado el mito de que las comisiones de investigación no sirven para nada”, afirman fuentes de su grupo parlamentario en el Senado, que sostienen que la comisión “está siendo un éxito porque está destapando la corrupción que acorrala a Sánchez”. El análisis al detalle de las sesiones certifica que la investigación política promovida por el PP apenas ha aportado nuevos avances respecto a lo ya determinado por los tribunales sobre la presunta trama de corrupción vinculada a Ábalos durante su gestión al frente del Ministerio de Transportes.

Entre los “frutos” de estos trabajos parlamentarios destacan en el PP revelaciones como la realizada por el ex jefe de gabinete de Salvador Illa, Víctor Francos, que en una comparecencia en abril de 2024 reconoció que Illa le había pedido que recibiera a Koldo García durante la pandemia. En el PP confiaban en limitar las opciones de Illa en Catalunya e incluso que su posible implicación en la trama fuera utilizada contra él. Apenas dos semanas después de su comparecencia en la comisión —y la de su ex jefe de gabinete—, Illa ganó en las urnas y acabó siendo investido como president de la Generalitat de Catalunya.

El partido de Núñez Feijóo también pone el foco sobre las revelaciones sobre Jéssica R., la antigua novia del exministro Ábalos enchufada en empresas públicas a las que no fue a trabajar, según ha acreditado el Supremo. La encargada en Tragsatec de supervisar su trabajo en 2021 explicó que ella intentó durante varias semanas que fichara, pero que desde la dirección del gestor ferroviario Adif, la empresa cliente, le pidieron que hiciese “la vista gorda”.

Esta misma responsable afirmó que el cargo de Adif con el que trataba esa encomienda, Ignacio Zaldívar, le dijo que “dejara en paz” a “la sobrina del ministro”. Los trabajos también han constatado que Adif “no tiene una relación de puestos de trabajo”, lo que hace muy difícil “seguir la trazabilidad de los diferentes empleos que puedan tener”, denuncia el senador de ERC Joan Queralt.

Asimismo, el PP destaca comparecencias como la de la vicepresidenta de la Comisión Europea y exministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, quien reconoció que se había visto con el supuesto comisionista del caso, Víctor de Aldama. Ribera encuadró ese encuentro en una reunión con el ex consejero delegado de Globalia Javier Hidalgo en la que Aldama acudió como “acompañante” para presentar un proyecto turístico que “nunca se llegó a materializar”. El empresario trabajaba para Air Europa. La compañía le pagó 12.100 euros al mes desde noviembre de 2019 hasta noviembre de 2020, coincidiendo con la aprobación del rescate.

“Una comisión prospectiva”, según el PSOE

El senador Alfonso Gil, portavoz del PSOE en la comisión, defiende, sin embargo, que “a día de hoy no se ha determinado ninguno de los objetivos” que se marcaron los grupos cuando se acordó su creación por unanimidad. “Es una comisión prospectiva donde se analiza todo aquello que el PP quiere con el objetivo de buscar la deshumanización del presidente del Gobierno”, cuestiona.

El PP llegó a citar a Cristina Álvarez, la asesora que gestiona la agenda de Begoña Gómez, a pesar de que esa causa nada tiene que ver con el caso Koldo/Ábalos/Cerdán. “Podía salir de aquí como víctima o como cómplice y usted ha elegido”, le espetó el senador del PP Alfonso Serrano. La asesora se negó a declarar con el argumento de que había sido citada como testigo. El juez Juan Carlos Peinado la acabó imputando tiempo después.

La supuesta asistencia de Ábalos a fiestas en Paradores durante la pandemia, con encuentros sexuales y destrozos, han ocupado también varias sesiones en las que los senadores de la derecha han esgrimido las informaciones de medios digitales basadas en fuentes anónimas. El director del Parador de Teruel —uno de los señalados en esas informaciones— negó que se hubiera celebrado cualquier tipo de fiesta o que hubiera habido destrozos. El PP había pedido su declaración después de que OkDiario publicara que Ábalos había llegado a ese establecimiento en una furgoneta con prostitutas una noche de septiembre de 2020.