En un contexto de creciente tensión nuclear, el portal Global Firepower ha publicado un informe que destaca a China como la principal potencia naval del mundo. Este informe ha captado la atención de expertos en seguridad y defensa, especialmente tras el anuncio de varios países sobre la reactivación de sus operaciones nucleares.

China ha superado a naciones con un alto potencial militar, como Estados Unidos, Reino Unido y Rusia, al posicionarse en el primer lugar en poderío naval. Según el informe, el Ejército Popular de Liberación cuenta con una impresionante flota de 754 buques, que incluye submarinos, corbetas y patrulleras. Esta cifra no solo la convierte en la flota más numerosa del planeta, sino que también duplica a las de sus competidores más cercanos.

El informe de Global Firepower 2025 resalta que, a lo largo de los últimos 20 años, China ha implementado una política de expansión marítima sin precedentes. Su objetivo ha sido aumentar su influencia en la región del Indo-Pacífico y proteger sus rutas comerciales. Aunque ocupa el segundo lugar en tonelaje acumulado, lo que indica que su flota es efectiva en desplazamiento, algunos análisis sugieren que muchos de sus buques son patrulleras o embarcaciones menores, lo que limita su capacidad oceánica plena.

A pesar de esto, el informe señala que China posee cientos de buques operativos, incluyendo destructores modernos, fragatas avanzadas y submarinos de propulsión nuclear. Este crecimiento en su capacidad naval refleja un cambio estratégico hacia la innovación tecnológica y la precisión operativa, en lugar de simplemente aumentar el número de unidades.

Además, China ha integrado portaaviones de última generación y sistemas de misiles antibuque con capacidad de actuación a grandes distancias. Esto fortalece su poder disuasorio, que se extiende más allá de sus fronteras regionales. El informe concluye que China está en camino de convertirse en una marina global, consolidando su posición como una de las principales potencias navales del mundo.