La muerte de Jaime Esteban Moreno ha reavivado el recuerdo del caso de Luis Andrés Colmenares, debido a las similitudes en las circunstancias. Ambos incidentes ocurrieron en Halloween y están relacionados con la Universidad de los Andes, aunque con diferencias significativas. Francisco Bernate, abogado del caso, señala que, a diferencia de Colmenares, donde todos los involucrados eran estudiantes de pregrado de la universidad, en el caso de Moreno, el agresor, Juan Carlos Suárez, no ha estado vinculado a la universidad desde hace dos años. Bernate aclara que, aunque Suárez fue presentado como un estudiante destacado, en realidad no está matriculado en la Universidad de los Andes. "Él tiene una vida meritoria, pero tampoco ha sido el mejor. Se ha pretendido construir un mito", afirma Bernate, quien también menciona que Suárez podría tener problemas con el alcohol y la ira. Las audiencias judiciales han revelado que la muerte de Moreno fue consecuencia directa de la agresión. Bernate sostiene que tanto Suárez como Ricardo González actuaron en conjunto durante el ataque. "Ellos actuaron de común acuerdo. Cada uno aportó golpes, en un caso para reducirlo y en el otro para matarlo", explica. Los informes médicos indican que Moreno llegó en estado crítico al centro médico de Chapinero y, a pesar de los esfuerzos por salvarlo, no sobrevivió. Se ha mencionado que una patada en la cabeza podría haber sido el golpe mortal, pero Bernate aclara que no se puede individualizar un golpe específico como causante de la muerte. Además, se ha identificado a una joven venezolana en los videos del incidente, quien supuestamente instigó la agresión. Bernate señala que ella jugó un papel crucial al señalar a Jaime Esteban, lo que llevó a que su acompañante no sufriera lesiones. La investigación continúa mientras se busca esclarecer todos los detalles de este trágico suceso.