El Partido Popular español rompió este lunes la disciplina de voto junto a sus homólogos polacos y votaron junto a la ultraderecha en contra del objetivo de una reducción de emisiones contaminantes del 90% en 2040 en el Parlamento Europeo. La votación tuvo lugar en la comisión de medioambiente de la Eurocámara. Mientras la mayoría de los miembros del PP Europeo votaron a favor, los eurodiputados conservadores españoles unieron sus votos a la ultraderecha negacionista climática aunque no lograron tumbar la iniciativa, que salió adelante con 55 votos a favor y 32 en contra.

El secretario general del PP, Miguel Tellado, ha intentado desvincular el cambio de postura de la negociación con los ultraderechistas de Vox de un candidato para la presidencia de la Generalitat valenciana tras el anuncio de dimisión de Carlos Mazón.

Tellado ha asegurado que no ha habido ningún cambio de postura y que así se recoge en el programa electoral de las elecciones generales del 2023. Según el secretario general del PP los objetivos climáticos “deben ser revisados” en la situación actual porque suponen una merma de la competitividad de las economías de los estados que formamos parte de la Unión Europea.

Sin embargo, el Partido Popular español podría haber seguido el planteamiento mayoritario de sus compañeros del PP europeo que han aprobado que la Comisión Europea evalúe el progreso de los objetivos intermedios cada dos años, teniendo en cuenta los datos científicos más recientes, los desarrollos tecnológicos y la competitividad internacional de la UE.

Esta revisión evaluará el estado de las eliminaciones netas de la UE en comparación con lo que es necesario para alcanzar el objetivo de 2040, así como las dificultades emergentes y el potencial para mejorar la competitividad global de las industrias de la UE. La revisión también considerará las tendencias en los precios de la energía y sus repercusiones tanto para las empresas como para los hogares. Esta revisión podría implicar modificar el objetivo de 2040 o tomar medidas adicionales para salvaguardar la competitividad o la unidad social de la UE.

La vicepresidenta tercera de Transición Ecológica, Sara Aagesen, ha declarado en la red social Bluesky que lamenta el voto del PP contra los compromisos climáticos. “Mientras la crisis climática ya nos golpea con dureza, necesitamos unidad y ambición en la acción. Este voto va en contra del consenso europeo, de nuestro liderazgo internacional y en contra de la ciencia”, ha subrayado la ministra.

Ahora la propuesta va al pleno del Parlamento europeo, que tendrá que ser votada el 13 de noviembre para que puedan comenzar las negociaciones con los Estados miembros sobre la ley climática final. Los tres eurodiputados del PP español (Borja Giménez, Esther Herranz y Susana Solís) en la comisión unieron sus votos a otros tres eurodiputados del PP polaco, un neerlandés y una eslovena, que se posicionaron en contra de la reducción de emisiones junto a los partidos de la ultraderecha agrupados en Patriots, donde se incluye Vox, ESN, que cuenta en sus filas con los ultras alemanes de AfD, y ECR, donde está la eurodiputada de Se acabó la fiesta, Nora Junco.

Fuentes del PP español en el Parlamento europeo han justificado su posición en contra de la reducción de emisiones asegurando que como “polacos, eslovenos y Países Bajos. Creemos que es un objetivo no alcanzable ni realista. Nuestro parque móvil por ejemplo es de los más antiguos de Europa y la mayoría de las viviendas se calientan con combustibles fósiles”.

En la comisión parlamentaria también se aprobó que a partir de 2036 hasta el 5% de las reducciones netas de emisiones de la UE podrían provenir de créditos de carbono internacionales, que las eliminaciones permanentes de carbono doméstico se utilicen para compensar las emisiones difíciles de reducir en el sistema de comercio de emisiones de la UE (EU ETS) yla propuesta de los Estados miembros de posponer de 2027 a 2028 el inicio del ETS2, que pretende reducir las emisiones de CO2 de combustibles en edificios y el transporte por carretera.