La noche del 11 de noviembre, un trágico incidente en Kennedy dejó a un conductor fallecido tras ser agredido por una multitud. La esposa del hombre, que fue atacado después de atropellar a varios motociclistas, compartió en sus redes sociales una emotiva foto de la pareja con el mensaje: “Te llevaste mi vida, amor mío”. Este suceso ha generado diversas versiones y ha estado marcado por la violencia. Testigos y videos en redes sociales muestran cómo la camioneta azul del conductor realizó maniobras que resultaron en el atropello de motociclistas. Esto desató una persecución que culminó cuando el vehículo fue cercado frente a un conjunto residencial. Allí, el conductor fue sacado del auto y golpeado por un grupo de motorizados. Las autoridades trasladaron al hombre a un centro médico, donde falleció minutos después debido a la gravedad de sus heridas. La familia del conductor ha pedido cautela al interpretar los hechos. Un sobrino del fallecido declaró que el conductor sufría de ansiedad y agresividad, y que había estado internado previamente por estos problemas. Según su testimonio, la familia intentó evitar que saliera esa noche, pero no pudieron quitarle las llaves del vehículo. La familia también ha negado que el hombre estuviera en estado de embriaguez al momento del incidente. Aseguran que habían llamado a la Policía para solicitar ayuda, ya que el esposo presentaba cambios en su comportamiento. Describen esta llamada como una urgencia por problemas de salud mental. Sin embargo, muchos testigos afirman que el conductor sí estaba ebrio, lo que habría motivado la persecución y la reacción de la comunidad. Las autoridades han indicado que los exámenes forenses determinarán si había alcohol o sustancias en su organismo. Además, los registros de movilidad revelan que el conductor tenía multas acumuladas que superan los dos millones de pesos. Aunque estos antecedentes aparecen en los sistemas de tránsito, no implican responsabilidad penal por los hechos que llevaron a la agresión mortal.