El personal especializado realizó maniobras inmediatas para retirar y asegurar los cables, ya que representaban un riesgo para estudiantes, peatones y vecinos del área. La intervención permitió eliminar el peligro y garantizar la seguridad en la zona. La corporación exhorta a la ciudadanía a no acercarse ni manipular cables caídos o instalaciones eléctricas dañadas, y a reportar cualquier situación de riesgo al número de emergencias 9-1-1. También se recomienda mantener una distancia segura hasta la llegada de los equipos de respuesta.

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