A veces la política chilena se siente como la serie El Reemplazante : un sistema que promete cambios, pero vuelve a chocar con los mismos problemas estructurales. La militarización anunciada por Perú reactivó una alarma que en Arica viene sonando hace años, y que el gobernador Diego Paco vuelve a poner sobre la mesa: si la frontera es la puerta de entrada del país, no puede seguir funcionando como portón de lata en pleno ventarrón.

Y ojo: Perú no tomó esta decisión por capricho. El presidente interino José Jerí vio un aumento de ingresos irregulares hacia su país y un movimiento migratorio impulsado por el temor a expulsiones en Chile , y por eso decretó estado de emergencia con las Fuerzas Armadas. Un movimiento rápido, casi de final de temporada.

Mientras tanto, acá seguimos esp

See Full Page