Robert Lewandowski tenía la esperanza de poder conquistar una nueva Champions League, pero cada vez tiene más claro que esto es un objetivo casi imposible. Su futuro en el Barça es una incógnita, y la posibilidad de que diga adiós el 30 de junio, cuando finaliza su contrato, es realmente grande. Así que su deseo es poder despedirse haciendo historia, y acabando con la preocupante sequía que vive el conjunto azulgrana, que no conquista este trofeo desde 2015.

La anterior campaña se quedaron muy cerca, después de ser eliminados de forma agónica por el Inter de Milán en semifinales, y el objetivo que se marcó la plantilla antes de iniciar el curso era reinar en Europa. Por desgracia, con derrotas como contra el Chelsea , es difícil ser optimista. Y el astro polaco está totalmente cansado

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