WASHINGTON DC.– Cada año, miles de inmigrantes toman uno de los pasos más significativos de sus vidas: convertirse en ciudadanos de los Estados Unidos. Más allá del símbolo que representa el pasaporte azul, la ciudadanía abre las puertas a un conjunto de derechos, beneficios y protecciones que marcan una diferencia real en la vida diaria. • Derecho al voto: Los ciudadanos pueden participar en elecciones federales, estatales y locales, influyendo directamente en las decisiones que afectan sus comunidades.

Derecho al voto: Los ciudadanos pueden participar en elecciones federales, estatales y locales, influyendo directamente en las decisiones que afectan sus comunidades. • Protección contra la deportación: A diferencia de los residentes permanentes, los ciudadanos no pueden ser deportado

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