El régimen de Trump ha provocado una nueva controversia al cerrar abruptamente tres oficinas clave de supervisión dentro del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), dejando más de 600 casos de derechos civiles en el limbo y generando alarma entre legisladores demócratas, defensores de derechos civiles y denunciantes internos.
Redacción LTH
Las oficinas cerradas incluyen la Oficina de Derechos Civiles y Libertades Civiles (CRCL), la Oficina del Defensor del Pueblo de Detención Migratoria (OIDO) y la Oficina del Defensor del Pueblo de Servicios de Ciudadanía e Inmigración.
Estas entidades, mandatadas por ley federal, supervisaban las prácticas de inmigración y protegían los derechos civiles de los migrantes.
Violaciones flagrantes de la ley
En una carta del 26 de julio dirigida a la S