En la provincia de Buenos Aires, la alianza entre La Libertad Avanza (LLA) y el PRO muestra una notable sintonía, mientras que en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) se percibe una distancia significativa. A pesar de que ambos partidos han establecido un esquema de colaboración, la dinámica es diferente en cada lado de la General Paz. En Buenos Aires, Karina Milei lidera la estrategia de campaña, con el apoyo del jefe del PRO local, Cristian Ritondo, quien ha sido clave en la formación de esta alianza.

Ritondo estuvo presente en la primera foto de campaña en Villa Celina, donde se mostró con el buzo violeta diseñado por los libertarios. Además, participó en una reunión en la Casa Rosada con Lule Menem, uno de los organizadores de LLA, para definir los pasos a seguir en la campaña. A la salida, Ritondo mencionó que el plan es “ir de gira a todos los barrios”. Sin embargo, no asistió a las reuniones de la “mesa bonaerense” que se han llevado a cabo en las últimas semanas.

Karina Milei, junto a Pareja y Menem, está al mando de la estrategia, mientras que Santiago Caputo se encarga de la planificación. Esta mesa chica ha sido responsable de la creación del polémico eslogan “Kirchnerismo Nunca Más”, que se presentó en un evento reciente. El próximo acto de Milei se llevará a cabo en un club de La Plata, donde se espera que hable por primera vez a sus seguidores desde el inicio de la campaña.

En contraste, en CABA, las diferencias son evidentes. Aún no se han definido los nombres para las listas, que se anunciarán el domingo. Desde ambos sectores se anticipa que trabajarán de manera independiente. Un candidato expresó que “la campaña la hace LLA. ¿Por qué tendría participación alguien que pone un candidato en 5to lugar?” Esto refleja la falta de colaboración entre los partidos en la capital.

El PRO en CABA se encuentra en una situación convulsa. Diego Guelar anunció que declinaría su candidatura a Senador Nacional si Alberto Crescenti acepta ser el postulante. María Eugenia Vidal también se ha distanciado, ya que no desean ser considerados como un apoyo secundario en la campaña de LLA. En la provincia de Buenos Aires, sin embargo, el PRO ha aceptado las condiciones de la alianza sin objeciones.