WASHINGTON — En un giro irónico, la cumbre entre el presidente Donald Trump y el líder ruso Vladimir Putin será en una base militar en Alaska que fue crucial para contrarrestar a la Unión Soviética durante el apogeo de la Guerra Fría.
La reunión será este viernes en la Base Conjunta Elmendorf-Richardson, ubicada en las afueras de Anchorage, según un funcionario de la Casa Blanca que habló bajo condición de anonimato para discutir la planificación interna.
La base, creada mediante la fusión de la Base Aérea Elmendorf y el Fuerte Richardson del Ejército en 2010, desempeñó un papel estratégico clave en la vigilancia y disuasión de la Unión Soviética durante gran parte de la Guerra Fría.
A lo largo de su larga historia, la base albergó un gran número de aeronaves y tenía radares para detec