Incrédula se mostró una pequeña comunidad en Valencia, en la costa este de España, luego de que uno de sus integrantes fuera capturado por la Policía, tras amarrar, amordazar e intimidar durante dos días a su expareja para obligarla a retomar su relación.
De acuerdo con la Policía Española, el hombre invitó a su víctima a almorzar la tarde del sábado y la convenció de que tenía que irse a trabajar, para cerrar su apartamento con llave.
Antes de que pudiera hacer algo, la amenazó con un cuchillo y le quito el teléfono, la ropa y sus tarjetas bancarias para obligarla a quedarse en la propiedad.
Pero, no contento, la amarró y amordazó en su habitación para amenazarla hasta que aceptara ser su novia. Un delito de malos tratos que será investigado con enfoque de género por las autoridades va