La escasez de unidades de transporte está causando desabasto de combustible en al menos dos estados de México. La Organización Nacional de Expendedores de Petrolíferos (Onexpo) ha solicitado al gobierno federal que actúe rápidamente para resolver esta problemática. La Onexpo destacó que la normalización en las operaciones de suministro es crucial para evitar el alarmismo entre los consumidores.

La presidenta de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, reconoció el problema en Chiapas durante su conferencia matutina. Aseguró que el combustible está llegando, pero hay dificultades con los contratos de los piperos. "Se va a resolver. No es que no haya; sí está llegando combustible, pero sí hay un problema ahí con los contratos de los piperos", afirmó.

Sin embargo, las quejas de los usuarios han comenzado a surgir en Nuevo León, Estado de México y Ciudad de México. Onexpo informó que desde el martes, algunas estaciones han reportado retrasos en el suministro de gasolinas de 87 y 91 octanos debido a la insuficiencia de transporte. Aunque no se considera desabasto, ya que hay producto en las Terminales de Abastecimiento y Reparto, se están experimentando retrasos logísticos en la entrega a diversas estaciones.

Hasta el momento, 42 estaciones en Nuevo León y 27 en Chiapas han reportado retrasos. Onexpo aseguró que Pemex está atendiendo la situación para evitar que las estaciones acumulen más retrasos. Sin embargo, el caso de Chiapas es particular, ya que se enfrenta a un paro de piperos.

Fuentes consultadas han indicado que el problema principal radica en el incumplimiento de pagos de Pemex a sus proveedores de logística y transporte. A pesar de un plan de fortalecimiento presentado por la empresa, los pagos a los contratistas no se están reflejando, lo que ha llevado a una reducción en los servicios de transporte.

"Pemex debe 430 mil millones de pesos a proveedores al cierre de junio de 2025", señalaron las fuentes bajo condición de anonimato. Este ciclo de impagos y cancelaciones de servicio está generando un círculo vicioso que complica aún más la situación del abasto de combustible en el país.