La tormenta tropical Erin, que se desplaza por el océano Atlántico, está a punto de convertirse en huracán, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC). Este fenómeno meteorológico, que se formó el lunes, podría alcanzar la categoría de huracán este viernes, marcando un hito en la temporada ciclónica 2025.
Erin se encuentra actualmente a 1.595 km al este de las Islas de Sotavento del norte y avanza hacia el oeste a una velocidad de 28 km/h. En su último informe, el NHC indicó que los vientos máximos sostenidos de la tormenta han aumentado a 95 km/h, con ráfagas más intensas. Se espera que Erin mantenga su trayectoria hacia el oeste-noroeste durante el fin de semana, mientras continúa fortaleciéndose.
Los meteorólogos advierten que Erin podría generar fuertes lluvias a partir de este viernes, afectando a las Islas de Sotavento del norte, las Islas Vírgenes de Estados Unidos y el este de Puerto Rico. Estas lluvias podrían dar lugar a tormentas repentinas, inundaciones y deslizamientos de tierra.
Si Erin se convierte en huracán, sería el primer gran evento de este tipo de la actual temporada ciclónica, que se extiende del 1 de junio al 30 de noviembre. Hasta ahora, las cuatro tormentas tropicales que se han formado en la cuenca del Atlántico no alcanzaron la fuerza necesaria para convertirse en huracanes.
Los expertos señalan que el futuro de Erin dependerá de su propia fuerza y de la influencia del anticiclón de las Bermudas, que actúa como un timón para los sistemas tropicales. Las temperaturas de la superficie del mar en el Atlántico occidental son más cálidas de lo normal, lo que podría proporcionar el combustible necesario para que Erin se intensifique.
Agosto es un mes clave para la actividad ciclónica, y se espera que la temporada de huracanes cobre vida en las próximas semanas. Hasta la fecha, se han registrado cuatro tormentas tropicales con nombre en 2025, pero ningún huracán. Los meteorólogos anticipan que la actividad tropical será superior a la media este año.