POR: JAIME ALBERTO ARRUBLA PAUCAR
Nuestra democracia se encuentra de luto; ha perdido una joven promesa para su futuro y la política sigue siendo una de las profesiones más riesgosas de este país; lo que produce poco aliciente para nuestros jóvenes. Pareciera que nuestra nación da vueltas en el mismo remolino de la violencia.
En mi generación, nuestros padres contaban el horror de la muerte de un candidato presidencial vilmente asesinado, crimen que convulsionó al país, se trataba de Jorge Eliecer Gaitán a mediados del siglo XX. Muy pronto nos tocó presenciar a nosotros el asesinato de importantes líderes políticos que aspiraban a la presidencia de la república; desfilan en ese camino de mártires Luis Carlos Galán; Jaime Pardo Leal, Carlos Pizarro, Bernardo Jaramillo Ossa, Álva