El show debe continuar, especialmente con una programación tan arrolladora de conciertos como la que Bogotá y Colombia tienen para ofrecer. Pero antes de abordar el torbellino de espectáculos, que cubre varios géneros, vale anotar que aún no superamos la triste noche de cumpleaños de la capital. En esta, por cuenta de un vandalismo perpetrado por barristas desadaptados, pero también por falta de prevención y reacción ante advertencias expresadas, una vida se apagó, decenas de personas fueron heridas y miles salieron con una memoria oscura.
No ha debido suceder, pero sucedió. Lección: ante señales claras, prevenir el doble, no ignorar. De parte del público, se espera que paguen los que causaron esto, quienes por una noche hicieron de un terreno de paz, uno de batalla. La única solució