
El Pentágono ha prohibido desde finales de primavera a Ucrania utilizar misiles ATACMS de largo alcance para atacar objetivos en el interior de Rusia, informa The Wall Street Journal (WSJ) citando fuentes.
Según la publicación, la medida forma parte de los esfuerzos diplomáticos de la Casa Blanca para impulsar negociaciones de paz. La publicación detalla que Ucrania intentó al menos en una ocasión emplear estos misiles contra blancos en suelo ruso, pero recibió una negativa expresa de las autoridades estadounidenses. La decisión final sobre el uso de estos sistemas recae en el secretario de Defensa, Pete Hegseth.
Estos misiles, cuyo último lote fue entregado a Ucrania en la primavera de 2025, fueron autorizados para su transferencia durante el gobierno del expresidente Joe Biden, aunque su uso operativo es sujeto a restricciones por parte de Estados Unidos.
¿Cambio de postura?
A finales de mayo, el canciller alemán, Friedrich Merz, anunció que cuatro países de la OTAN –el Reino Unido, Francia, Alemania y EE.UU.– habían levantado las restricciones al alcance de las armas que suministran a Ucrania.
En julio, algunos medios de comunicación reportaron que la Administración de Trump habría sopesado enviar a Ucrania misiles de largo alcance, capaces de alcanzar Moscú o San Petersburgo desde territorio ucraniano. No obstante, Trump aseguró que Washington no tiene tales planes.
❗️Trump: Zelenski no debe atacar MoscúAnteriormente, desde la Casa Blanca refutaron la información divulgada por algunos medios de que el presidente estadounidense instó a atacar Moscú y San Petersburgo.🗞️ https://t.co/3lf0Lh8OG4 pic.twitter.com/mFMEsfkuLR
— Sepa Más (@Sepa_mass) July 15, 2025
Moscú, por su parte, ha advertido en reiteradas ocasiones que se reserva el derecho de atacar instalaciones militares en países que permitan a Kiev atacar con su armamento en el interior del territorio ruso. El presidente Vladímir Putin ha subrayado que el uso de armas de alta precisión y largo alcance por parte de Ucrania solo es posible con la participación directa de personal de la OTAN, lo que constituiría su participación directa en el conflicto.