Gladys (45) perdió su pierna izquierda por un accidente a los 17 años. “Tenía una pensión desde 1998. Este mes fui a cobrar y no había nada depositado. Me acerqué hasta Anses y me dijeron que me habían dado de baja porque no me presenté al lugar en el que me habían citado, pero no me habían citado en ningún lugar”, explicó a PERFIL. “Al día siguiente llegó un correo a mi casa con una carta que informaba que me daban de baja la pensión porque no me presenté”.
Hasta junio, según la respuesta de la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis) a un pedido de acceso a la información pública que realizó la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), se habían enviado 834.157 cartas documento en el marco de las auditorías por las pensiones por discapacidad, pero, por distintos motivos, 38