El expresidente Álvaro Uribe Vélez ha reactivado su actividad política tras recuperar su libertad, confirmada por el Tribunal Superior de Bogotá. Uribe había estado bajo arresto domiciliario debido a un fallo en primera instancia por soborno y fraude procesal. Este miércoles, 20 de agosto, se dejó ver en Sabaneta, Antioquia, donde participó en una eucaristía católica y recibió el apoyo de numerosos seguidores que se acercaron para tomarse fotografías con él.
Desde su liberación, Uribe no ha perdido tiempo. El jueves, recibió en su finca en Rionegro a Miguel Uribe Londoño, quien le informó que recogería las banderas de su hijo, Miguel Uribe Turbay, fallecido el 11 de agosto por la violencia. En menos de 24 horas, el expresidente se reunió con los cinco precandidatos presidenciales del Centro Democrático, lamentando la muerte de Uribe Turbay y preparándose para su reactivación política.
El sábado, 23 de agosto, Uribe visitó la tumba de su hijo en el Cementerio Central de Bogotá, donde oró en silencio y se dejó fotografiar, a pesar de que el acto fue privado. Posteriormente, se trasladó al parque El Golfito, lugar donde fue asesinado el joven político, y recibió el apoyo de la multitud que coreó: “Uribe, amigo, el pueblo está contigo”. A pesar de la tristeza que le generaba el lugar, Uribe intentó saludar a los asistentes.
Históricamente, Bogotá no ha sido un bastión para Uribe en las urnas, pero las circunstancias podrían cambiar en el próximo año electoral. Las directivas del Centro Democrático consideran que el contacto directo con la gente podría ser clave para su campaña hacia 2026. El domingo, 23 de agosto, Uribe participará en un evento del Nuevo Liberalismo, dirigido por el precandidato Juan Manuel Galán, donde se abordará la crisis del sistema de salud en Colombia. En este evento también estarán presentes otros precandidatos de diferentes partidos políticos, en un esfuerzo por formar una coalición interpartidista que enfrente al petrismo en las elecciones de 2026.